Los inconvenientes de mantenimiento del hogar cambian según la temporada. Un problema típico de invierno ocurre cuando las cerraduras de las puertas empiezan a virar de manera lenta en climas fríos. Esto puede ser causado por la humedad en la cerradura que se congela o por una acumulación de suciedad y aceite durante un período temporal prolongado.
Humedad
La Lee mas cerradura de una puerta tiene una entrada directa a su mecanismo interior: el orificio de la llave. La humedad de la lluvia, la nieve y el hielo entra de manera fácil en la llave y se resguarda de la evaporación al instalarse en los numerosos rincones y grietas de una cerradura. Durante cualquier estación salvo el invierno, la humedad causa pocos problemas, pero en el frío puede congelarse y eludir que la cerradura gire. Suficiente humedad puede aun eludir que la llave entre en la cerradura.
Soluciones
Hay varias técnicas que pueden descongelar la cerradura de una puerta. Calentar la llave brevemente con la llama de una vela, un fósforo o un encendedor de cigarrillos puede ser la solución. Esto puede ser bastante difícil cuando las manos están cubiertas con guantes gruesos o manoplas. Los descongeladores de cerraduras están libres en tubos pequeños de bolsillo y latas de aerosol más grandes. Estos se pueden lanzar a chorros en una cerradura congelada para desplazar de forma rápida
